El próximo mes de julio marcará el inicio de un aumento progresivo en el costo de la electricidad en Chile, tras cuatro años de congelamiento en las tarifas. Aunque existen subsidios destinados a las personas de bajos ingresos, el incremento se reflejará en el presupuesto de muchas familias chilenas.
Álvaro Ortiz, presidente de la Asociación de Municipalidades de la Región del Biobío (Amrbb) y alcalde de Concepción, expresó su descontento con la situación, calificándola como una triste noticia para la ciudadanía. “Una vez más, los ciudadanos deberán asumir los costos de un gran negocio privado. Los municipios no tienen injerencia en la privatización de los servicios básicos, y ahora, una deuda de más de 6.000 millones de dólares con las grandes empresas de electricidad será pagada por la comunidad”, declaró Ortiz.
Particularmente, Ortiz se refirió a la situación en Coronel, donde los habitantes han sido eximidos del pago obligatorio que afecta al resto del país. Esta exención contrasta con la realidad de las 32 comunas restantes de la región del Biobío, donde los municipios, aunque sin mayor poder de decisión, buscan ser la voz de sus habitantes. “Solicitamos al presidente Boric, a nuestros parlamentarios y a las empresas, considerar esta situación”, agregó Ortiz.
Antonio Rivas, alcalde de Chiguayante y presidente de la Comisión de Energía de la Amrbb, también expresó su preocupación. Señaló que los municipios no tienen los recursos necesarios para atender a la cantidad de personas que solicitarán subsidios. “Las tarifas eléctricas en Chile son las más altas de América Latina, generando una desmedida rentabilidad para las empresas. Aquí hay dos problemas: la justificación del alza y su impacto, no solo en el 40% más vulnerable, sino también en las pequeñas y medianas empresas”, enfatizó Rivas. Criticó que el lucro privado se sostenga sobre el sacrificio social.
Rodrigo Montero, alcalde de Florida, advirtió que los vecinos rurales serán los más perjudicados. “En las zonas rurales, la energía es fundamental no solo para el consumo eléctrico sino también para el agua. Esta alza afectará gravemente a nuestras comunas rurales de la región del Biobío”, subrayó Montero. Expresó su preocupación por el impacto en los bolsillos de sus vecinos, especialmente en una comuna catalogada como una de las más vulnerables de la provincia de Concepción.