La gestión de recursos para los damnificados por el reciente sistema frontal en la Región del Biobío ya está en marcha. En este contexto, el ministro (s) del Interior, Manuel Monsalve, anunció la entrega de aportes estatales destinados a asistir a las familias que han sufrido los estragos del temporal en el país. Además, Monsalve confirmó que ha comenzado el catastro de la Ficha Básica de Emergencia (FIBE) en las áreas afectadas y que se proyecta completar la evaluación en la comuna de Curanilahue para el próximo miércoles.
“Nos hemos comprometido aquí, en Curanilahue, a propósito de este trabajo, que de aquí al lunes al menos mil fichas FIBE estarán aplicadas, de un total estimado de entre 1.500 y 2.000. Esto significa que para el miércoles es probable que se haya aplicado el 100% de las fichas FIBE en la comuna de Curanilahue, y es el ritmo que queremos mantener en todas las regiones del país”, aseguró Monsalve.
La implementación de la FIBE es crucial para identificar y cuantificar los daños, lo que permite una respuesta más efectiva y dirigida a las necesidades específicas de las familias afectadas. La rapidez en la aplicación de estas fichas es un reflejo del compromiso del gobierno con la pronta recuperación de las comunidades impactadas.
Durante el Comité de Gestión del Riesgo de Desastres (COGRID) regional celebrado en Curanilahue, el Gobierno también anunció la entrega de un “Bono de Recuperación” para aquellos que han sido perjudicados por el sistema frontal en la Región del Biobío y otras zonas del país. Este bono tiene como objetivo proporcionar un alivio económico inmediato a las familias, permitiéndoles afrontar los costos iniciales de la recuperación.
La respuesta del Gobierno ante esta emergencia no se limita solo a la entrega de bonos. Se han movilizado recursos humanos y materiales para apoyar en la limpieza y reconstrucción de las áreas afectadas. Equipos de trabajo se encuentran en terreno, colaborando con las autoridades locales y los residentes para restablecer la normalidad lo antes posible.
En paralelo, las autoridades han subrayado la importancia de la cooperación y solidaridad entre los habitantes de las zonas afectadas. “Es vital que trabajemos juntos para superar esta crisis. Cada acción cuenta, y la ayuda mutua hará la diferencia en la recuperación de nuestras comunidades”, indicó el ministro Monsalve.
Además, el Gobierno está coordinando con diversas instituciones para asegurar que los recursos lleguen de manera efectiva y rápida a quienes más lo necesitan. Se han establecido puntos de distribución y centros de apoyo en las áreas más dañadas, facilitando el acceso a la ayuda para los damnificados.
En resumen, la gestión de recursos y la entrega de bonos de recuperación en la Región del Biobío demuestran el compromiso del Gobierno con las familias afectadas por el sistema frontal. Las acciones implementadas, desde la aplicación de la FIBE hasta la distribución de ayudas económicas, reflejan una respuesta integral y coordinada para enfrentar esta emergencia y apoyar la pronta recuperación de las comunidades afectadas.