En un operativo realizado en la localidad de Liquiñe, comuna de Panguipulli, las autoridades descubrieron una fábrica clandestina de armas dentro de una casa de dos pisos. Durante el allanamiento, se encontraron diversas armas de fuego, tanto ensambladas como en proceso de fabricación.
Entre los hallazgos se encontraron 31 armazones de armas de fuego artesanales, 68 cañones estriados de pistola calibre 9 mm y 69 piezas metálicas de empuñadura. Además, se decomisó una pistola 9 mm con su cargador y 500 cartuchos del mismo calibre.
Además de las armas, se descubrieron equipos de comunicación radial de diseño militar, inhibidores de señal, un visor nocturno, vestimenta táctica y suministros de supervivencia y primeros auxilios.
El operativo también reveló la presencia de equipos de GPS y maquinaria industrial, como máquinas de tornería y fresadoras, que se utilizaban en la línea de montaje para la fabricación de las armas de fuego. El perito balístico de la Policía de Investigaciones (PDI), Alejandro Alcázar, confirmó la naturaleza de la fábrica clandestina y su capacidad para producir armas ilegales.